Al mismo tiempo, Nueva York sufre uno de sus inviernos más duros, en vez de fuego hay temperaturas extremadamente bajas.
Esto es una evolución sorprendente: por una parte se quema el país y por otra se está congelando todo. La falta de atención del resto del mundo ante estos extremos es aún más sorprendente: la gente ya está tan acostumbrada a estos extremos que les parecen hasta normal.
Aunque un estado entero que en su día fue el Jardín del Edén de los EEUU está sufriendo una sequía muy seria y muchos incendios, muchas personas, sobre todo políticos, niegan que algo estuviera ocurriendo. ¿Por qué?
Quizás una de las causas principales es que cada más personas viven en ciudades. No tienen ni idea que guardan relación con la Madre Tierra. No tienen ni idea de lo que es eso, tierra, suelo, hongos. No tienen ni idea que un m³ (27 ft³) de suelo bueno y sano contiene más seres vivos que todo el océano atlántico. Seres vivos que ahora se están quemando en California.
El problema es que están tan desconectados que para ellos “comida y bebida” ya no son sinónimo de “plantas, carne, leche y agua”. Comida significa comida procesada o hamburguesas y los niños se piensan que la lecha se hace en una fábrica. Al igual que la coca cola, eso que te hace tan feliz. Si no hubiera comida procesada ni coca cola y si no hubiera transporte y Los Ángeles tuviera que vivir de repente de la comida producida por la Madre Tierra, todo el mundo, incluyendo los políticos, entenderían el gran desastre que es que su alrededor se esté quemando.
Significaría que no habría plantas, ni carne, ni leche, ni agua. Menos mal que aún les queda una parte saludable de la Madre Tierra en Brasil. Y menos mal que tienen transporte. Así que dejemos que se queme California, no pasa nada. Cortemos el Amazonas y plantemos soja transgénica. Comida saludable procesada. Problema resuelto…
Pieter Hoff,
El mosquetero verde
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