Durante los últimos meses tuvimos un día de Tierra y Agua. El 17 de
junio tenemos el “Día Mundial de la lucha contra la Desertificación”,
organizados por la UNCCD. Tal y como escribí en mi último blog, es raro
que nos tengan que recordar que tenemos que cuidar de la Madre Tierra.
La Madre Tierra es nuestra casa y nadie destrozaría la casa en la vive.
Sin embargo, si destrozamos la Madre Tierra.
Esto significa que un error del sistema es la causa de la destrucción
de la Madre Tierra. ¿Dónde nos estamos equivocando? Es muy simple: si
destrozas la Madre Tierra, ganarás más dinero y si cuidas de la Madre
Tierra te costará más dinero. Si tiras agua industrial a un río sin
limpiarlo, obtendrás más beneficios. Si cortas madera virgen sin
replantarlo, obtendrás más beneficios. Si usas insecticidas y no solo
matas los insectos pero también los pájaros, obtendrás más beneficios.
Así que los incentivos son contrarios a los intereses de la
humanidad. El exceso de agua debería ser más caro que hacer la limpieza.
Deberíamos aplicar tasas a los leñadores y pagar a los plantadores.
Deberíamos multar a los usuarios de insecticidas y compensar los
cultivadores orgánicos. Deberíamos….
¿Esto ocurrirá algún día? No antes de que tengamos un desastre que
nos cueste, digamos, unas 100 millones de muertos. El ver que millones
de personas sufran y pierdan sus casas, como vimos recientemente en
Filipinas o en los estados de huracanes en EEUU parece que no sea
suficiente para inspirarnos para cambiar el sistema. Parece que de
verdad necesitamos un desastre de tal escala con un número de víctimas
inimaginable, puede que de repente entendamos que la Madre Tierra es
nuestra casa y que tenemos que mantenerla, al igual que nuestra casa.
Que el que destroza su casa tenga que pagar y que quien la mantenga
tenga que ser pagado.
Al igual que pagamos un carpintero, un albañil o un pintor de nuestra
casa, deberíamos pagar el que limpia el agua, el que plante árboles o
el cultivador orgánico que mantienen la Madre Tierra. Hoy en día mucha
gente piensa que un iPhone es importante y no se preocupa por agua
limpia. Morimos si estamos tres días sin agua. Eso demuestra lo
importante que es realmente la Madre Tierra.
No necesitamos celebrar días para acordarnos. Simplemente tenemos que
usar nuestra mente para empezar hacer lo que ya sabemos. ¡Cambiar el
error del sistema!
Día Mundial de lucha contra la desertificación
Pieter Hoff,
El mosquetero verde
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